El día 11 de octubre se celebra el Día Internacional de la Niña y es una fecha perfecta para recordar y dar visibilidad a los problemas y dificultades a los que se enfrentan las niñas de todo el mundo.
Los datos de Naciones Unidas sobre las niñas ponen en evidencia las desigualdades que siguen existiendo a día de hoy:
- Más de 110 millones de niños en el mundo, de los cuales 2/3 son niñas, no van a la escuela.
- De los 875 millones de analfabetos que hay en el mundo, 2/3 son niñas.
- El 50% de las niñas que viven en países en desarrollo (con la excepción de China) estarán casadas cuando cumplan 20 años.
- Al menos 1 de cada 3 mujeres han sobrevivido a alguna forma de violencia basada en el género.
- Se calcula que cerca de 500.000 niñas de menos de 18 años son víctimas de tráfico sexual cada año.
- La mutilación genital femenina afecta a 130 millones de niñas y mujeres en todo el mundo y pone en riesgo a 2 millones cada año.
- Más del 80% de los 35 millones de refugiados y desplazados en el mundo son mujeres, niños y niñas.
La situación de las niñas en el mundo requiere un gran trabajo de sensibilización para dar visibilidad a los problemas a los que se enfrentan y darles las oportunidades que merecen.
Desafíos a los que se enfrentan las niñas en el mundo
Las niñas de todo el mundo se enfrentan a desafíos muy importantes que deben superar día a día, entre los que se pueden destacar los siguientes:
– Lograr tener un acceso a una educación de calidad y evitar el abandono escolar. En muchas familias que viven en situaciones de pobreza, se decide que sean las niñas quienes abandonen su formación y trabajen para contribuir a la economía familiar. Esto perpetúa su pobreza. Por eso creamos las Becas Ella, que cubren los gastos básicos de escolarización secundaria de una niña durante un año: matrícula, mensualidad, tasas de examen y material escolar. La educación de las niñas y la continuación de su formación, más allá de la escuela primaria, puede ayudar a luchar contra prácticas como el matrimonio infantil. Por lo tanto, la educación de las niñas es una prioridad ya que contribuye a que:
- Su participación en el mercado laboral aumente.
- Tengan una mejor salud.
- Reciban unos ingresos más altos.
- Den una mejor educación a sus hijos y cuiden mejor de su salud.Que tengan menos hijos.
- Se casen más mayores.
– Vivir libres de violencia de género. La violencia de género sigue siendo una lacra en la actualidad. Algunas de las acciones que se pueden hacer para erradicarla tanto a nivel estatal como educativo son las siguientes:
- Lograr la ratificación de tratados internacionales que tengan como objetivo la protección de los derechos de las niñas.
- Velar por el cumplimiento de las leyes, evitando la impunidad de los culpables de actos de violencia de género.
- Crear una justicia que sea accesible para las mujeres dotándolas de servicios jurídicos gratuitos y especializados.
- Educar a los niños y niñas en valores como el respeto, la igualdad, la solidaridad y la paz.
– Aprender nuevas habilidades. El aprendizaje de nuevas habilidades se relaciona con la importancia de la educación y permite a las niñas adquirir conocimientos que les ayuden a crear su propio negocio como emprendedoras y ser independientes económicamente. Para lograrlo tendrán que adquirir conocimientos como: administración de empresas, contabilidad, ventas, estudios de mercados y formas de financiación, entre otros.
– Empoderarse y convertirse en lideresas. Existen muchos ejemplos de niñas que se han convertido en líderes y que luchan por los derechos de las niñas. Una de las niñas más conocidas es Malala Yoysafzai, una activista de origen pakistaní, que recibió el Premio Nóbel de la Paz en 2014 a los 17 años y que lucha por la defensa de los derechos de las mujeres, en especial, el derecho a la educación.
Conoce a las heroínas del día a día
En Educo tenemos la suerte de conocer historias no niñas que nos inspiran. Historias de superación, de éxito, de trabajo y constancia. Todas ellas son heroínas cotidianas que con su fuerza y su tesón se convierten en ejemplos a seguir. Estas son algunas de sus historias:
Jesmin Akhter, de alumna a profesora en una escuela de Educo
Jesmin es el ejemplo perfecto de lo que puede lograr una niña si se le da la oportunidad de formarse. Ella siempre quiso ser maestra, pero su familia quería que dejara de estudiar para casarla. Ella se negó y con el apoyo de los profesores de la escuela de Educo convenció a sus padres para continuar con sus estudios. Cuando acabó la primaria continuó estudiando en la escuela secundaria del gobierno con una Beca Ella de Educo y llegó a la universidad. Hoy ejerce de maestra y está cursando el último año de la carrera de empresariales.
Aminata: una madre soltera que se formó con Educo
Aminata es una joven de Burkina Faso que quedó embarazada muy joven y vivió como el padre del niño no asumió su responsabilidad. Cuando la conocimos, le ofrecimos la posibilidad entrar a formar parte de un programa de formación profesional. No lo dudó. Comenzó a trabar como aprendiz en un taller de costura y desde entonces lucha para mejorar su vida y darle un futuro mejor a su hijo. Su sueño es montar su propio taller.
Juanita: un ejemplo de superación en tiempos de coronavirus
Cuando el coronavirus llegó a Guatemala se cerraron las escuelas y los niños tuvieron que estudiar a distancia. Pero muchos niños como Juanita, no tienen los medios para hacerlo. En este caso, Juanita, como beneficiaria de una Bella Ella, consiguió comprar los libros que necesitaba y seguir haciendo los deberes.
Suhaila: la niña que sueña con ser doctora
Durante mucho tiempo Suhaila, una niña de Bangladesh, no pudi ir a la escuela con regularidad porque tenía que trabajar para ayudar a su familia. En 2010 fue admitida en una de las escuelas para niños trabajadores que tenemos en Dhaka. Durante años obtuvo buenas notas y en 2015, cuando se preparaba para el examen final del gobierno, su padre quemó la casa familiar y todos los libros y material escolar de la niña. A pesar de eso, gracias a la motivación de nuestro equipo y sus ganas de seguir estudiando, logró una matrícula de honor en el examen. Su objetivo es seguir estudiando para convertirse en doctora. Estamos convencidos de que lo logrará.
Laboni: quiere ser maestra y ayudar a los niños sin recursos de su comunidad
Laboni es una niña de Bangladesh que garcias ala apadrinamiento pudo continuar con su educación. Su padre vende verduras y su madre es ama de casa, por lo que no podían pagar su escolarización. Pero cuando se enteraron de que en su municipio había una escuela gratuita de Educo no duraron en llevar a su hija. Laboni ha obtenido muy buenos resultados. Le encantan las matemáticas y le gustaría ser maestra de otros niños sin recursos de su comunidad.
Todas estas heroínas nos demuestran que la educación es fundamental para salir de la pobreza, además de la fuerza de voluntad y el esfuerzo. En Educo impulsamos iniciativas para que las niñas vivan en condiciones de igualdad y tengan un futuro mejor, especialmente a través de nuestro programa de Becas Ella. Decubre cómo puedes regalarles esa oportunidad que tanto merecen.
Derechos de imagen: Pixabay/Stockio
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