24 de enero de 2022 – Con motivo del Día Internacional de la Educación, la organización de defensa de los derechos de la infancia, Educo, lanza la campaña #AlimentaSuEducación para incidir en la necesidad de un mayor apoyo al bienestar de las niñas y los niños mediante un mayor acceso a una educación de calidad, a una nutrición adecuada y a recursos educativos necesarios para su continuidad, especialmente ante el actual aumento de casos de COVID-19.

Rosa Virginia Sánchez, Asesora de Educación de Educo El Salvador, afirma: «Creemos firmemente que el bienestar de la infancia puede fomentarse considerablemente si se garantiza que las niñas y los niños puedan seguir estudiando en un entorno integral donde se sientan protegidos en todo momento. Para ello, las niñas y los niños deben tener un mejor acceso a una alimentación nutritiva, así como a herramientas y recursos educativos que les permitan aprender de manera más eficiente y protegerse ejerciendo sus derechos. Sin embargo, esto ha sido un desafío desde que ocurrió la pandemia».

Sánchez añade: «La crisis del COVID-19 sigue impactando la educación en todo el mundo, por lo que tenemos que abordar los retos de este derecho en todos los frentes y desde los distintos aspectos de las necesidades de la infancia para asegurar su continuidad educativa».

La campaña #AlimentaSuEducación refleja los esfuerzos educativos y el enfoque holístico de Educo en muchos de los países en los que trabaja. Esto incluye en El Salvador acciones encaminadas hacia el desarrollo integral en la primera infancia como atenciones educativas, nutricionales y de protección en esta etapa de vida; el desarrollo de huertos escolares en coordinación con el Ministerio de Educación; así como la implementación de acciones para prevenir la deserción escolar. De igual forma, Educo impulsa acciones a fin de promover que instituciones del Estado, las familias y la sociedad en general reconozcan su rol en el cumplimiento al derecho a la educación segura y de calidad.

Educo cree que proporcionar apoyo tanto al profesorado como a los alumnos también es clave para una mejor transición a la nueva normalidad. La última encuesta mundial de Educo, La voz de 8.000 niñas y niños: El derecho a la educación y a la participación explicado por niños y niñas del mundo, que analizó las respuestas de niñas y niños de entre 6 y 18 años en 12 países de Asia, América Latina, África y España, reveló que menos de la mitad (45%) de ellos pudo asistir físicamente a la escuela en algún momento, mientras que aproximadamente una cuarta parte no tenía otra opción que estudiar a distancia.

En El Salvador, la encuesta incluyó la participación de 395 niñas y niños, de estos el 36.7 % ha asistido a clases presenciales, el 31.9 % ha continuado con sus estudios de manera semipresencial y el 26.08% continúa desde casa, mientras que el 2% no ha podido seguir estudiando por falta de recursos y por la necesidad de trabajar. La niñez expresó que un factor para continuar estudiando fue la propuesta multimodal, es decir combinar la presencialidad con otras opciones no presenciales.

En Educo creemos que necesitamos activar la escucha con la niñez y adolescencia, esto implica que ninguna de nuestras acciones a favor de sus derechos debe partir solo de lo que pensamos las personas adultas, tenemos que escuchar qué opinan, cómo se sienten y qué nos sugieren las niñas, niños y adolescentes, solo así tendremos una perspectiva más inclusiva para enriquecer nuestro trabajo.

Es importante reconocer que el aumento en los casos de COVID-19 sigue amenazando no solo la salud de las niñas y niños sino también otros derechos como la nutrición, recreación, participación y sobre todo el de la educación, que por su carácter habilitador puede favorecer el cumplimiento de los derechos previamente mencionados.

Educo hace un llamado al Estado, las familias y la sociedad en general a trabajar de manera conjunta para que niñas, niños y adolescentes gocen de su derecho a la educación aún a pesar del contexto de la pandemia. La educación y el aprendizaje no se da únicamente en las aulas, es responsabilidad de todas y todos nutrir educativamente a través del acompañamiento, protección, alimentación, buen trato, espacios sanos y seguros, escuchándoles, tomando en cuenta sus propuestas. Si damos estos pequeños pasos, estaremos apostando a educar desde la raíz y generar verdaderos cambios en nuestro país.